Rubia
Saturday, December 18, 2010
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En un bar de cowboys en Roswell, Nuevo México, oí por casualidad
Primer cowboy: ¡Eh, jed! ¿Qué tal? ¿Cómo te encuentras?
Segundo cowboy: Bien. Muy bien. Me encuentro tan bien, que esta mañana no he tenido que masturbarme para ponerme el corazón en marcha.
(La cote basque, TC)
Saturday, November 15, 2008
Dientes
"Me fascinan las cosas de los dientes. La boca es el lugar de las palabras, el lugar de lo más evolucionado del pensamiento. Y dentro de un instrumento tan civilizado están los dientes, que son tan brutales y tan salvajes".
(Lucrecia Martel)
Equilibrio de factores
"Era linda, inoportuna y encantadora. La llevo hasta Lami, estacionó sobre la arena en un rincón secreto que conocía, a cincuenta metros del agua, y pasaron el resto de la madrugada cruzando los límites de su historia personal y del cuerpo del otro, retrocediendo en el instante justo antes de penetrar en experiencias sombrías o cometer algo que pudiese ser calificado de desubicado, para que no se desmoronase aquel estado de felicidad casi eufórica que vibraba en el interior del auto y parecía depender de un delicado equilibrio de factores".
(Daniel Galera, Manos de caballo)
Saturday, September 13, 2008
El mensaje oculto
Porque el licor de Miss Amelia tiene una cualidad peculiar: sabe limpio y seco en la lengua, pero una vez dentro empieza a arder y ese fuego dura mucho tiempo. Y eso no es todo. Ya es cosa sabida que si se escribe un mensaje con zumo de limón en una hoja de papel, no queda rastro de la escritura; pero si se expone el papel al fuego, las letras se vuelven de un color castaño y se puede leer lo escrito. Imaginad que el whisky es el fuego y que el mensaje está oculto en el alma de un hombre; entonces se comprenderá el valor del licor de Miss Amelia. Muchas cosas que han pasado sin que se supiera, pensamientos relegados a las profundidades del alma, salen de pronto a la luz y se hacen patentes. Un hilandero que no ha estado pensando toda la semana más que en los telares, la comida, la cama y otra vez los telares, al llegar el domingo bebe de aquel whisky y tropieza con un lirio silvestre. Y toma el lirio en su mano, se queda contemplando la delicada corola de oro, y de pronto se siente invadido de una ternura tan viva como un dolor. Y un tejedor levanta de pronto la mirada y por primera vez descubre el cielo radiante de una medianoche de enero, y se siente sobrecogido de temor al pensar en su propia pequeñez. Esas son las cosas que ocurren, cuando un hombre ha bebido el licor de Miss Amelia. Podrá sufrir, podrá consumirse en gozo; pero la verdad ha salido a la luz; ha calentado su alma y ha podido ver el mensaje que había oculto en ella".
(La balada del café triste, Carson McCullers)
Nada concreto
"El sólo quería amar; al menos no pedía nada. Nada concreto. La vida, pensaba Michel, tenía que ser algo sencillo; algo que pudiera vivirse como un conjunto de pequeños ritos, indefinidamente repetidos. Ritos al fin y al cabo un poco estúpidos, pero en los que, en el fondo, se pudiera creer. Una vida sin apuestas y sin dramas. Pero la vida de los hombres no estaba organizada así. A veces salía, observaba a los adolescentes y a los edificios. Una cosa era segura: nadie sabía ya como vivir".
(Las partículas elementales, Michel Houellebecq)
Wednesday, August 20, 2008
Wednesday, August 13, 2008
Nunca lo sabría
"Ahora ya nunca escribiría todo lo que no había escrito porque pensaba que no sabía lo suficiente para escribirlo bien. Bueno, ahora tampoco tendría que fracasar en su intento de escribirlo . A lo mejor es que nunca podrías escribirlo, y por eso demorarabas y aplazabas el comienzo. Bueno, ahora ya nunca lo sabría".
(Ernest Hemingway, Las nieves del Kilinmanjaro)
Thursday, July 31, 2008
Jóvenes juntos
"Quizás no hay nada, nunca, equiparable al recuerdo de haber sido jóvenes juntos. Quizás es tan sencillo como eso. Richard fue la persona que Clarissa amó en su momento más optimista". (Las horas, Michael Cunningham)
Monday, July 21, 2008
Complicidad
"Cuando piensa en el sexo, piensa en ella. En esos ojos, esos pechos, esa lengua, esa acogida. ¿Qué otra mujer podría amarle con tanta complicidad, con tanta calidez y humor burlón, o acumular con él un pasado tan denso? En toda una vida no sería posible encontrar a otra con quien aprender a ser tan libre, a quien complacer con tanto abandono y pericia. Por algún accidente del caracter, la familiaridad lo excita más que la novedad sexual (Ian Mc Ewan, Sábado).
Extraído de este blog.
